
Este post es una continuación y ampliación del anterior. Me pareció interesante ahondar en el concepto de la especificidad de los seminarios de tango a los que se puede acceder actualmente, y también, en relación a los comentarios de mis visitantes:
Antiguamente, en la época de esplendor del tango, la gente lo aprendía a bailar a traves de la trasmision de amigos o familiares, mirando y copiando a otros que bailaban bien. Eso hacía que, al no haber una infomación codificada, cada uno tratara de interpretarlo a su manera, y eso le daba un toque personal. No me voy a cansar de repetir que, para mí, el tango social, popular, originariamente tiene que ver con la diversidad y las infinitos estilos posibles, y no con la homogeneidad.

Actualmente, a partir de la recuperación del género, casi desaparecido en los '60's y 70's, la forma de traspaso de la información se volvió, en gran parte, académica. Estudiosos y bailarines de otras técnicas de danza hemos utilizado nuestros conocimientos para decodificar el baile, en un intento de comprender el motor de los movimientos para asimilarlos y como consecuencia, se facilitó la enseñanza y el aprendizaje. Esto es conveniente, y es parte de la evolución, que siempre trae nuevas formas de desarrollo. Pero, como todo, esto tiene un pro y una contra, el hecho de darle todo servido al alumno, puede hacer que no se favorezca la creatividad del mismo y el baile puede volverse repetitivo. Luego, la responsabilidad y la elección es de cada uno, por recrear lo aprendido, o no.

En cuanto a los dichos de Copes, creo que él fue uno de los primeros ingenieros del tango. También recuerdo el grupo de Carlos Petróleo que revolucionó el baile a fines de los '30, quienes desarrollaron una forma llamativamente teórica para la época. Copes fue el único que me dijo cosas específicas sobre el baile femenino en mis tempranos momentos del aprendizaje (1986): posturas de las piernas y pies, como manejarlos, indicaciones muy particulares sobre como seguir la propuesta del hombre, etc. En términos generales, todos se enfocaban en la parte del hombre.

Así que puedo afirmar con conocimiento de causa, que Juan Carlos Copes fue uno de los primeros ingenieros del tango...
Chán chán!!!
Fotos: la milonga / copes y nieves / milena plebs